La obesidad es una preocupación creciente en el ámbito de la salud pública mundial, y su manejo efectivo es clave para prevenir enfermedades crónicas relacionadas.

En el espectro del tratamiento de la obesidad, la técnica de elección o gold standard es la cirugía de obesidad o bariátrica (bypass gástrico y manga gástrica), pero la farmacoterapia comienza a desempeñar un papel importante por su utilidad como técnica “de ayuda”.

Recientemente, fármacos como la liraglutida, semaglutida y tirzepatida han emergido como potentes herramientas en la lucha contra este trastorno. En este artículo, exploraremos cómo estos medicamentos se están utilizando en diferentes etapas del manejo de la obesidad, especialmente en relación con la cirugía bariátrica, que es el tema al que se dedica IntraObes desde hace 20 años.

Los análogos de la GLP-1 (liraglutida y semaglutida), funcionan imitando una hormona que regula el apetito, lo que resulta en una reducción del hambre y, por ende, en una disminución de la ingesta calórica.

 

Liraglutida: más que un medicamento para la diabetes

La liraglutida se ha utilizado en el tratamiento de la diabetes tipo 2. Con este fin, utilizada por vía subcutánea es conocida con la marca Victoza.

Sin embargo, estudios han demostrado su eficacia también en la pérdida de peso, lo que la convierte en una opción viable para pacientes que luchan contra la obesidad.

En España, la Agencia Española del Medicamento y los Productos Sanitarios, acepta el uso de este medicamento para la pérdida de peso bajo la marca Saxenda, mediante inyecciones subcutáneas diarias en dosis progresivas.

ANTES DE PLANTEAR UNA CIRUGÍA BARIÁTRICA, está indicada para la ayuda a la pérdida de peso en IMC>27 con enfermedades asociadas (hipertensión, dislipemia, diabetes tipo II, etc.) y en IMC>30 sin necesidad de tener estas enfermedades, pero, en cualquier caso, junto a un programa integral de pérdida de peso que incluya cambio de hábitos alimentarios y de estilo de vida (sobre todo, ejercicio) y bajo control médico. Cuando estos métodos fallan, la cirugía bariátrica comienza a estar indicada.

EN LOS PACIENTES SOMETIDOS A CIRUGÍA DE OBESIDAD (donde las medidas anteriores han fracasado), la liraglutida puede ser particularmente útil para pacientes que han experimentado una pérdida de peso insuficiente o comienzan a recuperar parte del peso perdido después de la cirugía bariátrica, ofreciendo un método para potenciar los resultados.

 

Semaglutida: otro análogo de la GLP-1 con algunas diferencias.

La semaglutida está aprobada en España por la AEMPS para el tratamiento de la diabetes tipo 2, ya sea en su versión pinchada subcutánea 1 vez por semana (marca Ozempyc), u oral 1 vez al día (marca Rybelsus).

El Ozempyc, ha aportado la novedad de 1 pinchazo semanal (en lugar de diario, con lo que mejora el cumplimiento).

Hay una sustancia idéntica al Ozempyc aceptada para el tratamiento de la obesidad -no de la diabetes tipo II- que se vende en USA (marca Wegovy). Pronto llegará a España.

Mientras tanto las farmacias sufren una rotura de stock de ozempyc porque se está recetando -en realidad- para la pérdida de peso.

Aunque no hay demasiada evidencia, algunos estudios parecen sugerir que la semaglutida (Ozempyc) sea algo más efectiva, pero algo menos segura, que la liraglutida (Satxenda). Hacen falta más estudios para sacar conclusiones claras.

Un dato sí es objetivo: el precio en España del Ozempyc es aproximadamente la mitad que el de Satxenda (140 vs 280 euros/mes respectivamente). 

 

Tirzepatida: el nuevo contendiente

El tirzepatide (o la tirzepatida, como se prefiera), el último fármaco en esta lista, combina las acciones de las hormonas GLP-1 y GIP. Aunque inicialmente se desarrolló para el tratamiento de la diabetes tipo 2, los estudios han revelado su potencial en el control del peso. Para pacientes que experimentan recuperación de peso después de la cirugía bariátrica, el tirzepatide puede ser bastante útil, ayudándoles a mantener o lograr una pérdida de peso sostenida.

En otro post os doy más datos, pero este fármaco que aún no está a la venta en España (sí en USA), lo hace con el nombre comercial de Mounjaro, y los estudios sugieren que es significativamente más efectivo que semaglutida y liraglutida.

Es post posteriores trataremos ventajas e inconvenientes de cada una de esta moléculas, pero, tened claro dos cosas:

  1. Ya sea lo que leáis en redes: estas medicaciones por sí solas, sin esfuerzo (dietas, ejercicio, cambio en el estilo de vida), tienen malos resultados: poca pérdida ponderal y reganancia inmediata.
  2. La única técnica que ha demostrado su consistencia en cuanto a la pérdida y mantenimiento de peso a largo plazo en pacientes obesos es la cirugía de obesidad.

 

Espero haberos ayudado

Fdo. Miguel Ángel Escartí

Cirujano Bariátrico y Metabólico

Hospitales HLA La Vega (Murcia), Vistahermosa (Alicante), Moncloa (Madrid)