El parlamento Europeo ha aprobado un informe en el que pide a los Gobiernos que en los centros educativos se impartan obligatoriamente tres horas semanales de gimnasia como medio para frenar la obesidad infantil.

Esta propuesta ha sido planteada tras comprobar que, en los últimos años, el número total de horas lectivas dedicadas al ejercicio físico se han reducido notablemente: concretamente, de 121 a 109 minutos semanales desde el año 2002.

Además, los eurodiputados alertan de que el deporte ocupa un lugar muy secundario en las escuelas y de que se hace necesario un «alto grado de integración» entre el deporte y las asignaturas académicas. «Con frecuencia se sacrifica la educación física en beneficio de otras asignaturas». Los diputados recomiendan asimismo que se destinen más fondos a la creación de escuelas y estructuras deportivas en las zonas más desfavorecidas.

La Eurocámara subraya que la educación física es la única asignatura en la que se prepara a los niños para un estilo de vida saludable y se centra en su desarrollo físico y mental.