Después de la cirugía, durante las primeras 4 semanas, sí será necesario seguir una pauta alimentaria lo más extrictamente posible. La Banda Gástrica debe acomodarse bien en el estómago y el paciente habituarse a ella. Ésta es una etapa muy importante. En los meses posteriores, el paciente aprenderá a comer de forma equilibrada y variada, siguiendo una dieta concreta flexible, adaptada a su forma de vida, pero respetando los principios nutricionales y respetando la técnica quirúrgica. Todo ello, guiado y supervisado mes a mes, por su nutricionista. El paciente no tiene que «anclarse» a una dieta fija de por vida, de lo contrario, no aprende. Y el cometido en nutrición es ENSEÑAR.